Testimonios de violencia contra las mujeres





Testimonio 3:
Mujer 28 años Bogotá


…pues sí, alguna vez una propuesta de ser la amante de un señor que tenía varias empresas y me quería pagar la universidad…digamos era un ofrecimiento de una vida mejor, yo tenía 16 años…

 …era un amigo de mi papá muy allegado y lo visitábamos juntos por negocios y pues él le dijo que estaba interesado en ayudarnos y como era tan amigo de mi papá, cuando el nos ofreció su ayuda en esa situación tan difícil que estábamos viviendo, habíamos perdido la casa, papa y mama no tenían empleo fijo, estábamos sin servicios y en ocasiones teníamos que desplazarnos a pie… yo no había acabado el bachillerato y tenía una idea de una microempresa de artesanías…yo le conté de mi proyecto y él me invito a almorzar, me dijo que no le fuera a contar nada a mi papá…

 …el me preguntó que si yo tenía novio, que si ya había tenido relaciones sexuales y luego otras preguntas sobre la vida y de lo que yo quería hacer. Después de almorzar  el tipo comenzó a manejar hacia el norte y entro a un sitio como raro, lo saludaron y todo y yo no sabía que sitio era ese, era un motel tipo casa, estaba confiada de la compañía con quien estaba, sin embargo yo no me sentía cómoda y en  mi inocencia y mi ignorancia yo le pedí a Dios que me protegiera… yo me ubique en la sala de manera como  a la defensiva y luego me pidió que le diera un beso y yo le dije que no y él me dijo que porque y yo le conteste que porque yo lo veía como a mi papa…

 …el tipo me dijo luego que iba a ser muy sincero que él me había traído hasta ese lugar porque yo era muy bonita pero que solo me faltaba glamur – risas -   que me faltaba pulirme pero que él veía en mi a una persona muy especial y que no importaba que yo tuviera novio, que si yo aceptaba que él me iba a pagar la universidad que yo quisiera y que él no me iba a poner ningún problema ni ningún tipo de condiciones, que hiciera mi vida pero que estuviera sexualmente con él….

 …yo le dije que no, que me daba mucha pena pero que yo no podía concebir eso y él me dijo que lo pensara…y ya cuando nos volvimos a subir a ese carro pues me temblaba todo… el tipo me dio una plata…. Yo en mi interior le pensaba decir que pensara en su hija  que si le gustaría que le hicieran lo mismo a ella pero del susto no fui capaz, me temblaba todo… el tipo me dejo por la 76 y yo lloraba y me sentía tan mal aún que  no me había hecho nada y me fui para la casa de mi pastor, yo nunca iba allá y hable con su esposa, oramos y me tranquilice un poco, ella me sugirió que le contara lo sucedido a mis padres, de ahí me fui para donde mi mejor amiga y tampoco podía dejar de llorar hasta que le pude contar, allí estaba su mamá y entre chiste y chanza me dijo ahhhh pero no le paso nada, pues afortunadamente le tipo no me forzó pero yo  me sentía muy mal…

Al otro día hice lo que la pastora me sugirió, le conté a mis padres, mi mama también lloro y estaba enojada pero mi papa no dijo mayor cosa, yo esperaba que el hiciera algo, que le reclamara a su supuesto amigo de infancia al que consideraba un “hermano” pero eso no paso, después de un tiempo me enteraba que se seguían viendo como si nada, eso es lo que más me dolió, yo le hice el reclamo a mi papá varias veces el solo dijo que había pensado en quitarle los frenos al carro de su amigo, pero aunque a si fuera, yo pienso que esa tampoco es la manera de solucionar las cosas, la cuestión es mas de dignidad, lealtad y respeto entre amigos, aprovecharse de la calamidad de otros es un acto de injusticia.

Esta historia solo paso a ser un recuerdo en mi vida, pero me ha ayudado a ver que las personas difícilmente ayudan sinceramente y desinteresadamente a otras, y las mujeres estamos en continuos riesgos, si yo no hubiera tenido claro algunos valores como la dignidad, no venderme, el conseguir las cosas por mi propio esfuerzo, y la confianza en Dios que la situación económica iba a pasar en algún momento, aunque parecía eterna pues ya llevaba años, es posible que hubiera caído fácilmente en esa trampa.





Testimonio 2:
Mujer 55 años Bogotá

….ya me había ido a dormir, serian las 10 de la noche cuando la puerta se abrió y un sombra alta se fue acercando a mi cama… reconocí la voz,  era la del comandante de policía que solía frecuentar la tienda que mamá y yo atendíamos…era un hombre de piel oscura, cobriza, alto y con acento costeño… todo esto ocurrió al poco tiempo de la muerte de mamá y yo había quedado al cuidado de mi hermano mayor y su esposa.
…tenia trece años vivía en un cuarto de madera al que le habían quitado las bisagras de la puerta lo que facilitó que el tipo este entrara con facilidad, en el cuarto había una botella con trago y dos copas que ahora se porqué estaban allí.
… me decía que me quedara tranquila que me iba a dar unos consejos (pero yo por dentro sabía que no era nada bueno lo que estaba ocurriendo) le dije que me dejara poner los zapatos y mi saco pues hacia frio, cuando me agache logré salir corriendo por debajo de sus piernas…
…la casa tenía un patio alrededor donde habían perros y gansos, el tipo me perseguía y me amenazaba, los animales hacían ruido y lo alejaban pero el insistía, me acerque a la puerta de la otra habitación donde dormía mi hermano con su esposa y les pedí ayuda pero ellos nunca salieron, al contrario me gritaban en medio de insultos que no molestara….
… el tipo me amenazaba con dispararme si no le hacía caso,  me agarro por la espalda y me iba a obligar a entrar en el cuarto pero yo le dije que me dejara descansar un poco junto a una piedra donde con mamá acostumbrábamos trillar los cereales, el tipo accedió y nuevamente logre huir, los animales me protegieron, los gansos son como los perros atacan con la boca y las alas y hacen ruido …  el hombre aquel amaneció en el cuarto, se bebió el trago que por supuesto mi hermano y su esposa le habían ofrecido para hacerme daño… no sé porque no me disparo como decía, quizá no tenia balas… cuando aclaro el día mi hermano y su esposa me querían obligar a que le preparara el desayuno. Yo me negué, me insultaron pero no hice lo que querían… les conteste que si querían que me mataran pero que yo no iba a hacer lo que ellos querían.  El tipo me dijo que en otra ocasión yo se las pagaría. Le ofrecieron desayuno y al rato se fue.
Cuando mi hija tenía 12 o 13 años me decía que porque desconfiaba tanto de los hombres, de su papa, de sus tíos de sus hermanos. Ahora cuando hablo con ella ahora si me entiende y le digo que cuide muy bien a su hijo de las personas con quienes lo deja al cuidado, y pienso mucho en las niñas que habitan en cuartos solas mientras sus padres y madres trabajan, ojala sepan decir no y defenderse como puedan si alguien trata de manosearlas porque hay mucha gente mala que no piensa en el daño que hacen en la vida de las mujeres… y es que los niños entienden no importa la edad, uno les puede advertir y ellos entienden.
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La violencia en contra la mujer data de miles de años desde el antiguo testamento hasta nuestra época, el género femenino ha luchado para lograr el lugar que le corresponde dentro de la iglesia pero todavía nos falta mucho…vamos a lograrlo.
De una manera directa e indirecta la mujer ha sido maltratada, ignorada, discriminada en la iglesia, que ironía saber que donde hay una profesión de fe, sus miembros activen esa violencia contra nuestro género.
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Testimonio 1:
... hace mucho tiempo conocí a una mujer, "Diana" quien vivió un romance de 10 años con un miembro de la iglesia católica, ese hombre gozaba de un gran cargo en su comunidad, pues era sacerdote y por mucho tiempo le prometía a "Diana" que iba a estar con ella. El no le permitió que ella tuviera otra oportunidad en el amor y un día cualquiera "Diana" quedo embarazada.
Él cuando se entero pidió que lo trasladaran dejando a esta mujer a la deriva quien por desgracia perdió a la criatura y no tuvo a nadie que la apoyara pues debía callar por amor a este hombre para que no tuviera problemas en su comunidad.
Un día la conocí y no sé porque me contó su historia ya estaba más aliviada pues me afirma que perdió mucho tiempo a la sombra de un amor y que ella como mujer tenía derecho a que la amaran con respeto y no como un pecado y que el duelo para ella fue muy difícil pero que con fortaleza y oración salió adelante ya que se sintió traicionada y abandonada en silencio, que es lo más doloroso.
Hace un tiempo la volví a ver, estaba radiante, me conto que había conocido un buen hombre y estaba en planes de casarse me alegre mucho por ella porque encontró a un hombre que finalmente la valoro como mujer, esposa y futura madre.

El nombre de "Diana" ha sido cambiado para proteger la identidad real del testimonio.